Cómo empezó todo

Es tan difícil definir lo indefinible, que pensé que la divagante vida del beduíno era la que mejor podía representar ESTO: un sencillo cúmulo de reflexiones, de malas caricaturas, de diferentes estados y confusos sentimientos que forman parte de mi desierto interior.

martes, 7 de febrero de 2012

Y que me hablen de ocurrencias....

Vacío, miraba y estaba vacío, traslucido, un mar en calma aparente pero, al respirar algo dolía, algo había que pinchaba, era un fulgor, un destello, era veloz, no lo veía, sin embargo, lo sentía y, sin duda, algo familiar había en aquello. Era un ciego cosquilleo ciego pululaba a mi al rededor. La inestabilidad se respiraba en el ambiente aunque, no había nada, todo era oscuridad.
Se levantó un fuerte viento y, ahí estaba, aquel precipicio.... un abismo impresionante que se abría a mis pies. No podía dudar, un paso en falso y caería.
El tambor volvía a sonar en la oscuridad, su latido era lento, su retumbar se percibía en la lejanía y, en mi cabeza, sólo resonaba una palabra: alerta. Debía buscar ya la salida, de lo contrario, regresaría al laberinto de los temores, de los menosprecios e inseguridades. Fuerte, pisar fuerte, eso había que hacer, con paso firme estaría segura. Ahora ya, no podía mirar atrás, sólo me quedaba la valentía de nadar a contracorriente pero, ¿cómo?, ellos lo sabían, me habían creado, las olas siempre me arrastrarían con más fuerza
Entonces, allí me quedé, clavada, pensando lo que ellos ya conocían
roca, aire,cielo, tierra, ola, MAR y, sobre todo, SILENCIO

Entre lo químico y lo orgánico

Espejos de colores retractan mis composiciones,
la química de la vida se refleja en esa plata de lo extraño;
se asusta.
Esa química es un triste gato ante el espejo
Esa química lucha por el amor de la carne pero...
pronto cambia:
de lo racional a lo irracional
de lo lejano a lo cercano
de lo oscuro a lo claro
del desamor al amor
de lo dulce a lo amargo
de lo sereno a lo intranquilo
del río al bravo mar
de lo fabuloso a lo caótico
Siempre hay cambio porque el ciclo de la vida erosiona al ser y a la carne del hombre, erosiona lo mental, lo químico, lo orgánico pero siempre quedará algo de tu yo,
en tu ser, en tu carne
silencio...